jueves, 20 de octubre de 2011

AQUELLAS PEQUEÑAS COSAS…

Hoy toca post de desahogo. Se siente.
Vamos a partir de dos premisas:

  1. Yo ADORO a mis hijos. Los quiero hasta el infinito y más allá (como Buzz Light Year), pero a veces me sacan de quicio. Tienen ciertas cosillas o especialidades que me encienden,  no por importantes, más bien por reincidentes.
  2. Yo no soy muy atacada, presumo de paciencia (o de tener horchata en vez de sangre como dice mi santa madre) pero la reincidencia  agravada en algunas ocasiones con la premeditación y alevosía hay días que me hace hervir la sangre. Según cómo te pille el cuerpo. En aquellos días que estás agotada, con pocas energías o especialmente irritable, estas pequeñas cosas son como una mecha…

Son esas cosas que intentas corregirles una y otra y otra vez sin obtener resultados.

Vamos con la lista.
Yo, PORFINYOMISMA, confieso que en algunas ocasiones me saca de quicio:

·        que desborden el Cola Cao. Todas las mañanas. Sin faltar ni una. Cuando no es uno es otro. ¡¡Qué ganas de que aprendan el principio de Arquímedes!! ¡¡Que no se pueden echar galletas a mansalva en el Cola Cao y no prever que la taza rebose!!
¿Cómo es posible que les siga pasando una y otra vez??

·        que te pidan más de algún alimento o bebida y tú preguntes ¿¿Seguro que quieres más?? ¿Seguro?? Y ellos que sí, que segurísimo… y a continuación dejárselo porque no pueden más.
Me mata que me hagan eso.

·        terminar de limpiar los cristales y que se acerquen a abrir la ventana o la puerta de la cocina con las manos en los cristales y a ser posible llenas de algún tipo de pringue: caramelo, plastilina, mermelada, nocilla….

·        Que digan “No se vale!!” Cómo que “no se vale”? Yo siempre decía “no vale” ¿ahora es verbo reflexivo? Pues por más que les corrijo siempre les oigo “no se vale” cuando discuten por alguna norma de algún juego.


Luego cada uno tiene sus especialidades.

¿qué me desborda de A?

-         que resulte abducido por la tele. Le hablas y no hay respuesta. Le repites y nada. Le pegas bocinazo y empiezas hasta a preocuparte ¿estará catatónico? Lo único que funciona es ponerte delante del televisor “Mamá ¡que no veo!!” Y no os penséis que es con sus dibujos favoritos…¡¡le pasa hasta con los anuncios!!
Ya con el fútbol ni os cuento…
-         Que  se quite los zapatos sin desatar los cordones ¿qué trabajo le cuesta?? ¿se lo habré repetido veces?? Da igual. No hay manera.

¿qué me puede de E.?
-         que mee en modo aspersor. No necesita más comentarios.
-         que agujeree la ropa con el lápiz, pero que a la hora de escribir siempre lo tenga sin punta.
-         Que se cambie de calzoncillos 3 veces al día. Sí, limpio que es el chiquillo que diréis ¡ja! “Mamá hoy me tengo que duchar? SSSIIIIIII,…. Pero ¿Con jabón? SSSIIIIIII

¿qué me ataca del pequeño M.?
-         que las estanterías de sus cuentos parezcan continuamente saqueadas por una horda de hunos. Los coloco todos, salgo del dormitorio y cuando vuelvo a pasar por la puerta Atila ha atacado de nuevo
-         el ritual de todas las noches a la hora de la cena.
“M. te pongo dibujos?
“ssssiiiii”
(Pongo Winnie the pooh).
 “no…..eta no”
¿Pongo piglet?
“no….eta no….”
¿entonces cual?
“eta”
“¿Esta cuál?”
“eta”
“¿Mickey?”
“no, mickey no…eta”
“¿Pongo winnie?” (la primera que había puesto)
Ssiii, winnie.
Con ligeras variaciones en los títulos me hace lo mismo todas las noches. Confieso que los días que me coge ya con los ánimos recogidos para no pisármelos le pongo la que me sale del chominillo y le dejo protestar un rato.
 

Pues sí, ya veis, confieso que a veces pierdo la paciencia y soy una madre gritona. Supongo que no soy la única.
Si sale algunas más pues nos abrimos un grupo en facebook…o hacemos terapia ¿Qué es lo qué os saca de quicio de vuestras criaturas? ¿aquella pequeña cosa que por más que le repetís a vuestros primorosos hijos siguen haciendo una y otra vez…?

lunes, 17 de octubre de 2011

UN POCO DE TODO: QUESOS, GIGANTES Y CABEZUDOS, PECES, GATOS Y ARDILLAS EN LA ALHAMBRA…Y UN SUSTO.

Prometí contar el fin de semana y por eso me veo en ello, pero en realidad hoy estoy de un humor pésimo y no sé si es buena idea sentarme a redactar con el ánimo por los suelos. Bueno, ¿por qué no? Lo mismo hasta me animo.

El sábado empezó bien: el papá de las criaturas se fue con mi hermano a jugar un partido de fútbol, y se llevó a los dos mayores muy equipados para la ocasión: uno con la equipación del Barça (con unas calzonas enormes que parece que el muerto era mayor) y el otro con la equipación del Madrid.

Yo aproveché y me fui con M. y con mi madre de tiendas. Le compré un Barbour (¿se escribe así?) a A. y yo me compré unos guantes para la boda, porque siguiendo las recomendaciones de mi amiga R. voy a ir en plan novia de Cayetano Rivera (salvando las distancias, claro está, la hemos jodío…).

Quedamos todos juntos más tarde para ir a la feria artesanal del queso, dónde E. aprovechando la coyuntura se puso morao a probar toda clase de quesos…le faltó solamente probar el de los carteles.
A continuación de cervecitas, como no, y a casa a comer que nos dieron las tantas en la calle.

Por la tarde mis padres insistían en llevarse a A. a misa y A. insistía en no ir. Mucha comunión el colega pero nada de santa misa. Lo convencí con dos argumentos:
  1. que yo también iría con él (¡que no hará una madre por sus hijos!)
  2. que le iba a comprar dos sobres de estampas de la liga de fútbol (no nos engañemos, sí, lo soborné, pero surtió efecto)

Para una vez al año que voy a misa cojo al cura inspirado y comenta en la homilía que se la ocurrido pasar a los feligreses un recibo voluntario (¡faltaría más!) para colaborar con la parroquia que está la cosa muy achuchá. Si lo sé no vengo… ¡¡pero si ésa ni siquiera es mi parroquia!! Mi A. tenía los ojos como platos, estaba alucinando con el sermón.

Salimos de misa. Vuelvo a casa con A. lo dejó allí para ver el partido de fútbol con padre, abuelo y tío,  y me llevo a E. a ver la cabalgata de feria. Si tenía alguna gana de ir que me corten la cabeza, pero… ¡que no hará una madre por sus hijos…!

Afortunadamente la cabalgata fue una pasada (que otros años es una caca) y E. disfrutó como un indio. Había gigantes y cabezudos, creo que no los veía desde que era pequeña…E. se hizo una foto con un cabezudo espantosísimo, había animales marinos hinchables gigantes, un grupo de abanderados italianos de éstos que lanzan a tomar x culo las banderas (y las vuelven a coger afortunadamente), una manada de toros gigantes hinchables que te correteaban como en los Sanfermines y que me dió tremendo viaje en la cocorota con un  cuerno (yo pillada por un astado en los sanfermines, quien me lo iba a decir a mí)…y el momento culmen,: cuando E. vió venir a su amado Bob Esponja y se lanzó a abrazarlo. Tuve que acudir al rescate del pobre hombre…


 Llegué a casa casi a rastras…

El domingo los levanté al alba para irnos para Granada.¿Mamá qué día es? preguntaba E. desorientado: no le cuadraba eso de despertar tan prontito en domingo…

Lo de la Alhambra una maravilla. Sin palabras. A mi es que me tiene enamorada. Me gustan todos y cada uno de sus rincones.

Alhambra desde el Generalife
Generalife desde la Alhambra

Visitarla con 3 niños no es lo más recomendable, pero lo cierto es que se portaron bastante bien y disfrutaron de lo lindo.
A. y E. se hicieron fotos en casi todos los rincones. Y alucinaron sobre todo con los peces de los estanques, la gran cantidad de gatos (casi todos negros) que pululaban por los alrededores (claro, con tanto pez…, razonaba E.) y un ardilla que contemplamos en una higuera,… jejejeje.

uno de los pocos gatos que no era negro...


Según E. lo mejor, el Generalife. Según A. la Alcazaba. Me hizo subir hasta lo más alto de la torre más alta de la fortaleza. Sus mulas. Que palizón, que mano de escaleras…
Subí sola con él. Los dos E. no son de alturas. Para mí lo mejor los Palacios Nazaríes...

Palacios Nazaríes
Palacio de El Partal
Palacios Nazaríes
Alcazaba
Jardines de El Generalife
Patio de los leones (sin leones)
Jardines de El Partal
De allí nos bajamos a Granada a comer y mi hermano comentó que le gustaría ya que estábamos allí, ver la Catedral y la Capilla  Real (no por santurrón, es que ha hecho Historia del Arte).
Dimos una vuelta por los alrededores, les escribieron sus nombres en árabe.
Si algun@ sabe árabe, aquí se desvelan los nombres de mis tres hijos:
aquí los tenéis escritos...
(Aunque mi marido dice que ahí pone otra cosa, así que me reitero, si alguna sabe árabe y ahí pone alguna barbaridad que me avise antes de colgarselos en sus dormitorios, jajaja)

Descansamos a tomar un cafelillo en la plaza Bib-Rambla…y aquí llego el  chupinazo de la jornada. Demasiado buena hasta el momento. No podía ser verdad.
Os prometo que durante toda la mañana en La Alhambra cayeron, se golpearon y tropezaron mil veces. 
De hecho, una chiquilla francesa lleva en el pómulo un recuerdo made in Spain, por obra y gracia de mi hijo E. 
Iban los dos corriendo y chocaron…De hecho E. también lleva un buen moratón.

Pero estaban A y E tan ricamente correteándose por la plaza, jugando a... ¿qué? no lo sé..a perseguirse, o empujarse..no sé… con tan mala suerte que E. cayó sobre el pavimento de cantos rodados y sangraba profusamente por la cabeza. La sangre no se cortaba y conseguimos verle por fin la brecha. Una buena raja. Se había abierto la cabeza como una granada madura.
Su padre tuvo que ir fuertemente presionando la herida con un pañuelo, cogimos un taxi (que se saltó todos los semáforos en rojo habidos y por haber, no sé si del susto o por miedo a que le mancharamos la tapicería….Es broma, que el hombre fue superapañao)
E. lloraba desconsolado, de susto más que de otra cosa.
Su padre logró calmarle. “E, cariño ¿tú ves a papá nervioso?” No. “pues mientras no nos veas nerviosos no debes preocuparte, tranquilo” Y E. se calmó (yo no estaba nerviosa, estaba atacada, pero miraba a E. con cara beatíifica de ¿ves cómo mamá no está nerviosa? ¡¡que no hará una madre por sus hijos!!). 
Nunca lo hemos visto tan quietecico.
Resultado: 6 puntos. 3 de sutura y 3 de aproximación.
Os parecerá mentira pero es la primera vez que hay que echarle puntos.

Llegamos a casa a las tantas. “Puedes hacerme una foto para que vea la herida?” “Si claro, yo te la hago” “Qué eso negro, el hilo?” “Si” “¿puedes quitarme el esparadrapo?” “No es esparadrapo, son los puntos de aproximación” (me da que en cuanto me descuide se lo intenta quitar)

Esta noche ha dormido con nosotros. “Mamá ¿te acuerdas que le dije a A. que tanto gato negro daba mala suerte?” ¡qué cosas se le ocurren!

Ayer era mi aniversario de boda. No se me va a olvidar.

Afortunadamente ha sido un susto.

Mi  hermano me dijo después que A. se había pasado un buen rato llorando cuando nos fuimos con E. en el  taxi. Estaba muy asustado. Creo que le empujó. Pobrecito. No le hemos regañado, podría haber sido al revés (y hubiera sido mucho peor, porque E, se portó como un jabato mientras le cosían, no quiero imaginarme a A…).
Cuando volvimos del hospital adónde nos estaban esperando le había comprado un regalo, un cubo de Rubik… que M. a la noche desmontó cuadrito a cuadrito ¿alguien sabe como se recompone eso?

Y auí estoy, contándoos este rollo interminable en vez de estar en la feria con mis compis de trabajo, pero es que ando con una cististis que,sin entrar en detalles, os diré que debo estar a punto de que se me caiga a trozos la vejiga.. Y claro, no es plan de irse una a la feria y tirar de urinario público cada ¿media hora? en estas condiciones...
Mañana será otro día.

jueves, 13 de octubre de 2011

EL "RETONNO"

¡He vuelto!
Una semanita de desconexión gracias al maravilloso servicio que ofrecen las compañías de telefonía- ADSL en este pais.
Una semanita que ha dado para mucho. ¿Por dónde empiezo?

Os contaré de la operación pañal. Para aquell@s que piensen que mi churumbel anda ya  cual machote con calzoncillos os sacaré de vuestro error.


La seño de la guarde ha reculado y dónde dijo “Que si mujer, que yo lo veo muy maduro” ahora dice “va a ser que aún no ha madurado esa área del cerebro y es mejor volver a ponerle el pañal para que esto no le influya en futuros aprendizajes”
Tocátelo, a ver cómo te has quedado.
En resumen, ¿que hemos sacado de esta semana?:
-         Mi M. se ha ido meando por toda la casa. No hay habitación en la que no haya marcado territorio, con especial predilección por la cocina, que era verlo en la cocina quietecico delante de la tele y saber que estaba haciendo aguas menores.
-         Tengo una reserva de 24 calzoncillos, que lo mismo cuando sean aprovechables hasta se le han quedado pequeños.
-     Me conozco casi todo el repertorio que hay en you tube de canciones para quitar el pañal, incluidas las que están en japonés. Para muestra un botón. Ved y os sorprenderéis.



      M. ya cantaba Shi pa pa, Shi pa pa, shi pa pa .. (no quiero pensar cual es la traducción al japonés, jajajaja)

-         M. se lo ha pasado en grande. Yo lo sentaba en el wc, y para que aguantara sentadito le leía cuentos y hacíamos puzzles. Tanto gusto le ha pillado que ahora con el pañal puesto me pide caca o pis para que lo siente y le dé diversión ¡qué te lo has creido!. 
      Su seño además me anotaba en la agenda que le daba masajes en la nuca a la criatura para que se relajara en el orinal. Jajajajaja. Me parto. Según mi marido, estas dos cuestiones han influido muy positivamente para que M haya decidido no hacerlo ni una sola vez en el excusado ¡¡pero si estaba en la gloria!!
-         Siguiente consecuencia: como le poníamos un  reloj de estos de cocina para que fuera al baño cada 10 minutos ahora cuando oye el timbre del  horno, o de la placa de inducción o el cronómetro de su hermano grita “¡hora del pipí!. Y sale corriendo al baño. Lo hemos condicionado como al perro de Pavlov, jajaja

¿Qué más? 
Pues que el comienzo de octubre ha sido un no parar. Primeros días de futbol y baloncesto, primeros días de catequesis. Odio las reuniones del primer día de catequesis.
La de A. no estuvo mal, al menos fue corta. Al pobrecito mío le ha tocado la misma catequista del año pasado. Es una mezcla entre la anterior vicepresidenta del gobierno y Cruella de Vil. Vaya gachí más "malage".
La de E. fue soporífera. El coordinador de los catequistas nos tuvo 45 minutos de reloj dando la vara. No sabría deciros de que habló durante todo ese tiempo porque yo desconecté a los 5 minutos. Tengo una capacidad exquisita para desconectar…no me puedo quejar cuando la seño me dice lo mismo de E, herencia materna.
A E. le ha tocado un grupo compuesto única y exclusivamente por compañeros de su clase. Lástima le tengo a la pobre catequista. Ahí los lleva.

Mis padres y uno de mis hermanos vienen mañana a pasar unos días. Lo cual significa que me he pasado también unos días limpiando como una loca.
La última vez que mi madre vino se asustó “¿¿¿desde cuándo no planchas???” Y la cosa es que se pone ella a planchar lo cual me viene de perlas pero no me apetece que lo tenga que hacer, así que ayer me lié yo como una jabata y….(redoble de tambores)….¡¡¡ví el fondo del cesto!!! Qué contenta me puse.
Fíjaos cuánto hacía que no llegaba al fondo que descubrí una rebeca monísima que me compré el invierno pasado y que no recordaba que tenía. Más contenta aún.
Y mi esposo para celebrarlo abrió una botella de cava en la cena , jajajaja.

Hoy, después de 2 lavadoras de ayer tarde, el cesto vuelve a estar lleno…pero vamos que si hoy hay de nuevo celebración…eso me lo quito yo esta tarde.

Esta tarde, antes de salir, que he quedado con una amiga que me apetece muchísimo estar un rato con ella. Se casa el sábado 22.
Yo tenía comprado un bonito vestido. Lástima que se ve que he engordado y me queda pelín morcilla de Burgos.
Hasta hace poco pensaba que había perdido tetas. Pero no, no las he perdido, se me han ido al trasero.
No recordaba que el vestido me quedara tan corto. Dice E. padre que se debe a que tengo más culo. Guay. Después dijo que “con el sujetador adecuado te quedaría mejor” Ahí, arreglándolo.
Como resultado me he comprado nueva ropa interior y nuevo vestido…jajaja.

Tengo planes para no parar el finde. Empieza la feria. Y el domingo nos vamos a Granada, a visitar la Alhambra.
“A. cielo, nos vamos a ver la Alhambra con los abuelos y el tito.Qué guay, ¿eh?”
“Ummm….Si….”…………“Mamá , ¿qué es la Alhambra?”
Ains…¿cómo puede conocer la estatua de la Libertad y la torre Eiffel y no conocer la Alhambra?

Ya os contaré que tal.

Aún no he cocinado las galletas de ojitos tristones. Será buena señal ¿no?

miércoles, 5 de octubre de 2011

E. Y LA RELIGIÓN.



Os debía la segunda parte de A. y la religión. ¿Cómo le va a E. con el tema?
Para empezar a E. no le va eso de la oración de la mañana.
Su seño dice que desconecta. No le gusta rezar.

Sin embargo y paradójicamente ha sacado un notable en la asignatura ¿¿??
Y le gustan las historias de la Biblia. Pero, vamos en tipo cuento. Porque le gusta leer, y la Biblia infantil con dibujos le resulta entretenida.

Pero al igual que su hermano se hace la picha un lío con ciertos temas.

“Mira, mamá, un portal de Belén”
(el de la marquesina de El Corte Inglés, para más datos, que le pilla camino del cole)
“Sí, cariño, qué bonito”
“Con la Virgen, el señor y el niño Jesús”
“¿Cómo que el señor y el niño Jesús? ¿Y san José?
“¿Y ése quién es?” ¡¡!!


“Mamá. ¿Al señor lo mataron los “jodíos”? “
“Sí, E. lo mataron los jUdíos.”
“y al niño Jesús?
“E. cariño el señor y el niño Jesús son la misma persona”
"Anda , ¿si?"   (que follón familiar que tiene liao)


También se hace preguntas:

“mamá, ¿cómo sabía Noé los animales que tenía que meter en el arca? ¿tenía una lista?”
“pues,…la tendría..”
“ y ¿Por qué no hay ya unicornios..?¿se le olvidaron?” “¿y dinosaurios? ¿Y el mamut de la edad de hielo?¿no cabían?”

Para mi hijo, Noé tiene la culpa de la extinción de muchas especies…jejeje




“¿mamá en el cielo hay campos de fútbol?”
”Hombre, claro”
“Y allí si te caes  no te haces daño ¿no? Por las nubes y eso.”
“Tu verás, un chollo…”
“bueno, ya, pero de todas formas yo todavía no quiero irme”
Nos ha jodío, ni yo tampoco!!

Pero en general no le va mucho. No le interesa.


En líneas generales no es muy creyente. No sé muy bien por qué. Porque cree en el ratoncito Pérez, y cree firmemente en las hadas…si hasta discutió con su amigo F. porque éste decía que las hadas no existían y E, le advirtió que podían morir como Campanilla si seguía diciendo esa barbaridad…
¿¿qué trabajo le costaría creer en Dios?? Pues según le ha dicho a  A. , E. sospecha que Dios no existe.

¿por qué ha llegado a esa conclusión? Porque no cumple lo que le pide (inciso: ¿¿qué le pedirá??)
El ratoncito Pérez no le falla, los Reyes Magos tampoco …pero no es posible que Dios no le escuche o no le haga caso , luego debe ser que no existe…
Difícil está la cosa.

“Mamá cuando la gente le pide a Dios que llueva…”
“¿Si?”
“habrá otra gente que le pida que no llueva…”
“Si….”
“¿Y a quién le hace caso?”
“Bueno E., yo creo que Dios no se mete en el tema meteorológico?
“¿Entonces para que se lo piden?”


Ahora qué según él lo de la comunión no se lo pierde.¿Por los regalos?¿Por qué la hacen todos sus compañeros? Noooo:
“Porque tengo curiosidad por saber como sabe el cuerpo de Cristo, ése en forma de galleta, y tú dices que el cura no me lo va a dar hasta que haga la comunión.”

Como aún le quedan 3 cursos, pues ya se le pasará, o no…que E es muy suyo.

domingo, 2 de octubre de 2011

MAGDALENAS TRISTES


Ayer hice magdalenas.

Me salieron tristes.  Y diréis vosostros ¿qué quiere decir esta mujer?  Pues que me salieron tristonas, apocadas, muy poquita cosa. Vergonzosas.



Normalmente hago magdalenas de vida alegre. Se me desparraman y todo, se desbordan.

Sobró tanta masa que mi marido hizo un bizcocho. Con mucha mejor pinta que mis magdalenas. Snif.
Pobrecicas. Las hermanas feas del hermoso bizcocho panzón.


Ahora, que si te las comes con los ojos cerrados, están gloriosas. Esponjosas, riquísimas. Qué gran verdad lo de que la belleza está en el interior.
Y la mejor prueba es que las he llevado al campo para merendar y no han dejado ni una.

La cocina no es lo mío. No se me da bien. Tampoco practico, todo hay que decirlo, que ya se sabe que la practica lleva a la perfección.

¿Y cómo es que ayer me dio por ahí? Porque cuando estoy muy nerviosa, hacer dulces me relaja. Y ayer estaba nerviosa.

Mi M. se meo 9 veces encima. 0 en el wc. Con un par. Antes de ponerle el pañal para la siesta tuvo hasta los santos c…… de subirse a la cama y mearse encima.

Yo con la muñeca jodida (accidente laboral) y venga a estrujar la fregona.

A las seis y pico mi marido me sugirió que saliera a dar un paseo. “Anda cariño, vete a dar una vuelta antes de que le hagas al niño un nudo en la churrilla”

“Me voy a por ingredientes para repostear”

 Bueno, primero iba hacer las galletas con lacasitos que hizo Gema en su blog “En mi nube de azúcar”  y que Drew de “Viviendo en mi nube azul” ha ido perfeccionando como pudimos ver en  este post.

Y me vine aprovisionada con azúcar avainillada y azúcar moreno y hasta tiré la casa por la ventana y compré un bote de esencia de vainilla. Y por supuesto los lacasitos.

Pero luego ya en faena, me di cuenta de que no estaba tan depre como para liarme  con las galletas, que eso de hacer bolitas con la masa para mi son palabras mayores. Y me decidí por las magdalenas.

Cuando las saqué del horno y las ví me acordé de la película “Como agua para chocolate”… ¿la habéis visto? Pensé que las magdalenas tenían la misma pinta que yo por dentro. De bajón.
Pero luego se las han comido tan ricamente mis hijos, sobrinos y cuñadas y estaban todos de risas, así que no es contagioso al menos.

Hoy que estoy ya de bajón total porque a la serie de meadas estratégicamente distribuidas por toda la casa hay que sumar un par de” marrones”, uno de ellos en el sofá, lo mismo me pongo como una loca a hacer galletas.

 Y cuando estén hechas me imagino que las galletas me miran con ojos (lacasitos) tristones…

Si, vaya tela, ya sé que me ha quedado un post muy raro. Mañana será otro día…

miércoles, 28 de septiembre de 2011

VAMOS A VER SI CONCILIAMOS PERO DE VERDAD VERDADERA…

Imagino que a estas alturas de la película ya todas habéis oído hablar de la plataforma “Conciliación Real Ya”. 
Hay muchas blogueras que se han ido sumando a la iniciativa, pero ya estáis acostumbradas a que yo voy siempre tarde… y 
 Todas se explican con seguridad mejor que yo,pero desde aquí quiero aportar mi granito de arena.



Yo voy a centrarme en un punto del que no se ha hablado demasiado, la conciliación laboral-familiar una vez que los hijos han pasado los primeros años de vida y se incorporan al colegio.

Yo me considero afortunada porque mi jornada laboral coincide prácticamente con el horario escolar de mis hijos.
Aquí en Andalucía los colegios tienen horario de 9 a 14, en infantil y primaria y un poco más amplio (creo que de 8:00 a 14:45) en la ESO.
No hay colegio por la tarde.
Yo llego a casa  a las 15:05 porque vivo al ladito del trabajo, del que salgo a las 15:00, y tengo toda la tarde para estar con ellos.

Pero no siempre ha sido así. También he tenido que trabajar en jornada partida. Y llevar a mi hijo mayor a la guardería con 16 semanas porque no tenía con quien dejarlo, mi empresa en aquel entonces no me dio muchas opciones y era imposible en aquel momento dejar de trabajar. Y lo veía  ya por la noche. Pasaba gran parte del tiempo con su padre, pero yo tenía un nudo en el estómago del tamaño de la cabeza de Dora la Exploradora.

Afortunadamente mi empresa actual me puso jornada intensiva cuando me incorporé de mi última baja maternal.

Pero sé que hay muchísimas madres con jornada partida, sin tiempo para ver a sus hijos hasta por la noche.
Porque en muchos casos al horario criminal se le añaden eternos deslazamientos hasta el domicilio en las grandes ciudades.

Lo normal en otros paises europeos es hacer una jornada intensiva y salir de trabajar como muy tarde a las 17:00. Hay algunas empresas en España que están siguiendo esta tendencia. Pero son las menos. Un descanso de una hora para almorzar y hacer toda la jornada de un tirón.
Es evidente que hay profesiones en que esto no es posible. Pero las empresas y organismos públicos deberían hacer un esfuerzo para adaptar horarios, flexibilizarlos, incorporar el teletrabajo, otorgar permisos para visitas médicas, etc.

Ya os he comentado antes que tengo suerte porque trabajo en una empresa que ha aparecido varios años en el ranking de Best Place to Work.( mejor lugar para trabajar, para l@s que sean de francés…).-

Permite reducciones de jornada, da más semanas de las que corresponden por ley de baja maternal, tienes permiso para ausentarte por visitas médicas… permite adaptar mis vacaciones a las de mis hijos (vamos a ver, no me dan el mismo número de días del que disfrutan los fieras felizmente asalvajados, que más quisiera yo…pero no me obligan a cogerlas en una determinada fecha).
Creo que todas estas medidas no deberían estar reguladas por convenio colectivo y disfrutarlas en algunas empresas y otras no, sino por ley.

Y alguna dirá, ¡¡hala!! ¡qué burra! eso no se puede hacer… Pues que me lo expliquen.

¿Qué otras medidas se me ocurren? Pues en relación con las bajas maternales, creo que se debería de incentivar de alguna manera (fiscalmente, con la exención del pago de cuotas de la seguridad social…) la contratación de una mujer que se incorpora de nuevo al mercado laboral tras un paréntesis en su carrera profesional para dedicarse a su familia…

En general la mayoría de las madres no queremos que nuestros hijos pasen más horas en el colegio o la guardería, no queremos una mayor oferta de servicios para colocar a nuestros hijos toda la tarde ….
Todo eso está bien para el que por circunstancias personales lo necesite, o para aquellas personas tengan que echar mano de ellos.

Es más, yo no estoy en contra de las guarderías, que mis tres hijos han ido y yo estoy agradecida y emocionada (como diría Lina Morgan) porque han estado divinamente atendidos y no los veo yo traumatizados, no.
Pero debería ser una elección personal y no una obligación para muchas madres el llevarlos.

Lo que de verdad estaría bien sería la implantación de unos horarios laborales racionales y de unas medidas que nos permitieran disfrutar más tiempo de nuestros hijos.

Que se dejen de chorradas con lo de tiempo de calidad. Mis hijos no saben que es la calidad, pero ya saben como funciona eso de medir el tiempo y lo rápido o lentas que van las agujas del reloj.
Por supuesto que les gusta ir al colegio, jugar al fútbol por la tarde con sus amigos,  hacer deporte en actividades extraescolares… Pero también les gusta que los lleve a la biblioteca y leamos cuentos,  que hagamos magdalenas y se nos quemen o desparramen (no sé calcular bien la levadura por lo que se ve), les gusta que nos tumbemos en el sofá a ve la tele o a vaguear sin hacer nada…

Todas deberíamos tener derecho a esos momentos, y no a llegar a casa pasadas las ocho, o las nueve y verlos un ratito antes de acostarlos. Claro, que se ve que si en ese ratito le enseñamos inglés o la declinación tercera del latín seguramente sería considerado tiempo de calidad. ¿no?