Éstas están siendo unas navidades raras. Muy movidas. Se me están pasando volando, casi sin darme cuenta, y aunque me gustaría saborearlas más, estoy tan ocupada que se me están escapando entre las manos.
Espero que a partir de la próxima semana que estoy de vacaciones pueda dedicarme a fondo a disfrutarlas con los niños, aunque algo me dice que al tercer día de vacaciones (mías y de ellos) estaré hasta el chomino de fiestas…
Pero el espíritu navideño ronda por casa. Y hace de las suyas.
Nos poseyó en la semana del puente y en un arrebato, mi marido y yo nos armamos de valor y decidimos montar árbol y belenes. Si, belenes en plural: el intocable y otro para que ellos le metan mano.
Entre los 5 + mi sobrina- ahijada montamos el árbol, que nos quedó así de chulo.
Los adornos están estudiados: todo lo que quede a la altura de M, que sea irrompible, y los adornos caros y frágiles fuera de su alcance.
Es demasiado grande, lo sé, he tenido que cambiar todo lo de mueble de detrás porque no podemos coger nada de lo que queda por detrás del árbol hasta que lo desmontemos.
Este es uno de los belenes: lo compramos en un mercadillo solidario. El año pasado en un meneo que le metió E. el San José chamaquito se me cayó por detrás del mueble, y cómo cuesta un huevo moverlo, ahí se quedo la virgen, solica en el portal, como si éste hubiera ido a por tabaco y nunca más se supo. A ver si este año aguanta todas las navidades.
El otro belén es de cabezudos de plástico+ remix de playmobil. M. tiene todos los días a los elefantes rodando por ahí, pero aparte de coger a los 2 paquidermos parece que el resto de las figuras me las está dejando tranquilas. Debe ser que ahora su peli favorita es Dumbo.
Los niños ya han tenido su función de navidad.
E. tenía que bailar y cantar una canción de Bustamante y ¿Axel? “Celebra la vida”. De primeras se negó en redondo. Hasta su seño me dijo que si no quería que no lo forzará.
Y yo me veía en la tesitura ¿Qué hago? Le dejo que no salga? Oye, si no le gusta, pues nada…Pero por otro lado me decía que tenía que darle un empujoncito y ayudarle a enfrentarse a su “miedo”. Al final, un día se puso a ensayar solo y el dia del festival estaba hasta nerviosito. La seño con un par de ovarios lo puso en primera fila y, aunque yo pensaba que éste le reventaba el número, lo cierto es que lo hizo fenomenal.
A. por su parte tenía que cantar un villancico y tocar la flauta., para lo cual nos estuvo torturando con los ensayos durante más de 2 semanas. Y lo peor es que cada vez que cogía la flauta, E. cogía la suya y M. su clarinete de plástico y ¡hala! Todos a una!!
Salió muy bien, aunque claro con 75 niños en el escenario tocando la flauta imagino que si alguno desentonaba y tocaba otra cosa no se hubiera notado.
Quise grabarlos en video pero no pude, porque la cámara estaba sin batería y el cargador está en el mueble detrás del árbol :-)
También he tenido la cena de navidad de empresa, la cual me ha tenido muy ocupada porque con el cachondeo del amigo invisible mis compañeros y yo nos lo hemos pasado pipa durante varias semanas pensando maldades varias, jajajajaja
La cena fue el pasado viernes y nada, genial, a las 6 de la mañana volví a casa.
Además entre medias he tenido varios cumpleaños de amigos de A. y E., migas en el campo con la familia, unas hermosas placas en la garganta que me tienen con fiebre desde el domingo, …etc.
En fin, que hoy estamos a 20 y aún no tengo ningún regalos de navidad para mis hijos. Guay. Pero en fin, mis hijos no están pensando en regalos aún…
Están esperando lo que les he prometido: tengo que sentarme con A. y E. a hacer algunas felicitaciones navideñas artesanales, y tengo que hacer galletas navideñas con ellos, …
Y tengo que disfrazar a M para la fiesta de navidad del cole, que es el viernes… ¿de qué lo disfrazo? El año pasado fue de reno…
Y comprar un hamster ruso que es lo que mi ahijada le ha pedido a Papa Noel!!! Y pensar en qué plato voy a llevar a la cena de nochebuena en casa de los suegros (yo lo pienso y lo hará mi marido que es el cocinero, pobrecico mío)….
Y tengo que buscar las zambombas y las panderetas…que en la noche del 24 hay que cantar villancicos sí o sí, para eso los tengo puestos en casa y M. ya hasta se sabe las letras… Aunque a veces me dice “mama, eéste no, quere AYAYAY.”…
Que no es que me pida la marimorena, no, es el estribillo de la canción de Marc Anthony con Pitbull “Rain over me” …
Y ya mismo estamos cenando en familia en casa de los abuelos, mientras los niños arman escandalera con zambombas, panderetas, cascabeles... (Nota mental: comprar zambomba nueva a E. que el año pasado la suya se la cargó el tito).
Y abriendo los regalos, y en la dinámica de todos los años. A mi sobrina J. le gustará el regalo de su prima B. A mi sobrina B. le entrará por los ojos lo que le han traído a A. Mi hijo A. por su parte querrá lo de E. E. se enamorará instantáneamente del regalo de su primo. . . Todos jugarán con lo que le traigan a M. y M. intentará sabotear los regalos de todos...
El día 30 nos iremos para mi tierra a pasar allí el fin de año y celebrar en condiciones la entrada del nuevo… y nos quedaremos por allí hasta después de Reyes...ya os iré contando…
Bueno, aún me quedan muchos días para disfrutar la Navidad,…. A ver si además cuando esté de vacaciones puedo ponerme al día con los blogs, que estoy desaparecida, lo sé, pero ya no me da el cuerpo pa más (que no os quiero ni contar cómo llevo el curso de inglés…)
Por si acaso no me vuelvo a conectar en unos días ¡¡¡FELIZ NAVIDAD A TODOS!!!! Que disfrutéis de estas fiestas como niños…..